Descripción
El polen es recogido de las plantas de su entorno por las abejas y lo transportan hasta la colmena en forma de gránulos, que elaboran ellas con el néctar de las plantas. Los gránulos son de diversos colores: anaranjado, verde, amarillo, café, morados, etc.
Mediante un proceso especial se recolecta en la piquera de la colmena, con trampas. Nosotros sólo lo deshidratamos a una temperatura óptima, lo limpiamos y congelamos, por lo tanto no pierde sus propiedades alimenticias. La energía eléctrica que ocupamos en los procesos la producimos nosotros, con un sistema fotovoltaico conectado a la red de 4,5 kWp, generando hasta 6.300 kWh al año, inyectando a la red la energía sobrante, lo cual nos da un sello verde de sustentabilidad para la producción de nuestro polen de abeja,.
El ser humano lo usa como suplemento alimenticio natural, pues tiene múltiples beneficios en la nutrición, aumentando el bienestar y vigor. Numerosos estudios realizados han llegado a la conclusión que, después de unos días de tomar polen, el organismo se siente más vigoroso, con mayor fuerza y con un deseo vital más fuerte.
Es rico en proteínas y contiene 22 aminoácidos esenciales para la dieta humana, enzimas (amilasa e invertasa, entre otras). Contiene vitaminas del complejo B, incluso pequeñas cantidades de vitamina B12, vitamina C, vitamina E; minerales.
Mejora el sistema inmunológico y ayuda a prevenir resfríos, sobre todo en cambios de estación. Mejora la concentración. Ideal para estudiantes y deportistas.
Dosis: Se recomienda partir consumiendo una cucharadita en ayunas, disuelta en agua, jugo o leche, por un período de 30 días. Descansar 10 a 15 días y repetir. Luego de unos días se puede aumentar la dosis diaria a una cucharada sopera, usando la misma forma de consumo y frecuencia.
Contraindicaciones: Pueden presentar síntomas adversos personas alérgicas a productos de origen apícola.